¿Cuál es la ciencia detrás de la prueba del detector de mentiras?

El Polígrafo: Ciencia, Mitos y Realidad

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El polígrafo, conocido popularmente como "detector de mentiras", es una herramienta que ha capturado la imaginación del público, apareciendo en películas, series y debates sobre seguridad y justicia. Sin embargo, su funcionamiento, fiabilidad y verdadero propósito son a menudo malentendidos. Lejos de ser una máquina mágica que lee la mente o detecta la verdad absoluta, el polígrafo es un instrumento diseñado para medir ciertas respuestas fisiológicas del cuerpo humano ante estímulos específicos, como preguntas.

¿Cuál es la función del polígrafo?
El polígrafo o detector de mentiras es una técnica auxiliar para la averiguación de la verdad, que le otorga al juez criterios para corroborar la veracidad o la credibilidad de un testimonio o la versión del investigado.

Su aplicación se extiende a diversos ámbitos, desde la selección de personal en sectores sensibles hasta las investigaciones criminales (aunque con limitaciones legales significativas) y, de forma creciente, a la resolución de conflictos en el ámbito privado, como los casos de supuesta infidelidad. Comprender qué mide exactamente, con qué precisión y cuáles son sus limitaciones es fundamental para evaluar su utilidad y pertinencia en cada contexto.

Índice de Contenido

¿Qué es el Polígrafo y Cómo Funciona?

En esencia, el polígrafo es un dispositivo que registra simultáneamente varias respuestas fisiológicas involuntarias de una persona mientras esta responde a una serie de preguntas o escucha ciertas afirmaciones. La teoría subyacente es que mentir genera estrés, miedo o ansiedad, y que estas emociones provocan cambios medibles en el cuerpo.

Los parámetros fisiológicos que comúnmente mide un polígrafo incluyen:

  • Ritmo Cardíaco y Presión Sanguínea: Se registran mediante un manguito de presión en el brazo. Mentir (según la teoría) podría aumentar la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
  • Respiración: La tasa y profundidad de la respiración se miden con unos tubos colocados alrededor del pecho y el abdomen. Los cambios en el patrón respiratorio (como contener la respiración) podrían interpretarse como indicadores de engaño.
  • Conductividad de la Piel (Respuesta Galvánica de la Piel): Se mide con electrodos colocados en los dedos. La transpiración aumenta la conductividad eléctrica de la piel, y un aumento súbito de la sudoración (incluso a nivel microscópico) puede ser una respuesta al estrés asociado con el engaño.

La prueba comienza con una entrevista previa, donde el examinador explica el proceso y establece una línea base del comportamiento fisiológico del sujeto. Luego, se formula una serie de preguntas que incluyen preguntas neutrales (cuya respuesta se conoce y no genera estrés), preguntas de control (diseñadas para generar una respuesta fisiológica en personas veraces, a menudo sobre transgresiones menores) y preguntas relevantes (directamente relacionadas con el asunto investigado).

El examinador compara las respuestas fisiológicas a las preguntas relevantes con las respuestas a las preguntas neutrales y de control. Se considera que hay indicios de engaño si las respuestas fisiológicas a las preguntas relevantes son significativamente más fuertes que las respuestas a las preguntas de control.

¿Qué efectividad tiene el polígrafo?
Aunque el polígrafo no es infalible, sus porcentajes de acierto se han estimado, en condiciones óptimas, entre un 92% y un 98% de precisión. La exactitud depende de factores como: Experiencia del examinador: Un profesional con formación y trayectoria sabrá preparar y analizar los resultados con rigor.

Es crucial entender que el polígrafo no detecta la mentira per se, sino que mide reacciones corporales asociadas con el estrés, la ansiedad o el miedo que, teóricamente, acompañan al acto de mentir. Por lo tanto, una persona muy ansiosa que dice la verdad podría mostrar reacciones fisiológicas similares a las de alguien que miente, y una persona que miente sin sentir estrés podría pasar la prueba.

Objetivos y Aplicaciones del Polígrafo

El principal objetivo de la prueba de polígrafo, como se menciona en la información proporcionada, es identificar áreas de información que una persona podría no revelar en una entrevista convencional. Se utiliza para apoyar la confiabilidad de un individuo, especialmente en el ámbito corporativo y de seguridad.

Sus aplicaciones son variadas:

  • Selección y Evaluación de Personal: Es común en puestos que requieren un alto grado de confianza, como personal de seguridad, manejadores de información sensible, o en empresas para prevenir robos internos o fraude. Busca detectar antecedentes o intenciones deshonestas que no se revelan en currículums o entrevistas.
  • Investigaciones Internas: Las empresas pueden usarlo para investigar incidentes específicos como robos, fugas de información o sabotajes, intentando identificar al responsable entre los empleados.
  • Investigaciones Criminales: Aunque los resultados no suelen ser admisibles como prueba en juicio (como veremos más adelante), el polígrafo se utiliza a veces como una herramienta de investigación para orientar interrogatorios, evaluar la credibilidad inicial de un sospechoso o testigo, o incluso para intentar obtener confesiones (la confesión sí sería admisible).
  • Ámbito Privado: Casos como la sospecha de infidelidad son un ejemplo cada vez más frecuente de uso del polígrafo para intentar resolver crisis de confianza en relaciones personales.

En todos estos casos, el propósito es obtener información que de otra manera sería difícil de conseguir, sirviendo como un filtro o una herramienta complementaria en el proceso de toma de decisiones o investigación.

Fiabilidad y Limitaciones Científicas

La fiabilidad del polígrafo es quizás el aspecto más controvertido y debatido. Aunque algunos estudios y profesionales en condiciones óptimas estiman su precisión entre un 92% y un 98%, estas cifras son objeto de considerable escepticismo dentro de la comunidad científica y legal.

¿Cuál es el objetivo de la prueba de polígrafo?
Tienen como propósito identificar aquellas áreas que la persona no revelaría en una entrevista normal, además de apoyar en la confiabilidad de la persona.

Varios factores pueden influir en la precisión (o falta de ella) de la prueba:

  • Experiencia del Examinador: Un examinador mal capacitado puede interpretar erróneamente los datos fisiológicos, diseñar preguntas inadecuadas o conducir la prueba de forma deficiente.
  • Diseño de las Preguntas: Las preguntas deben ser claras, específicas y formuladas para obtener respuestas dicotómicas (sí/no). Preguntas ambiguas o que inducen a error disminuyen la fiabilidad.
  • Estado Físico y Mental del Examinado: Condiciones médicas, trastornos psicológicos, el consumo de ciertas drogas o medicamentos, e incluso un simple resfriado pueden alterar las respuestas fisiológicas y afectar los resultados. Un alto nivel de ansiedad general, independientemente de si se miente o no, puede confundir al examinador.
  • Contramedidas: Existen técnicas que una persona puede emplear para intentar alterar sus respuestas fisiológicas y engañar a la máquina (como morderse la lengua, apretar los esfínteres, o usar estimulantes/depresores). Aunque los examinadores experimentados y los equipos modernos están diseñados para detectar algunas de estas contramedidas, su uso sigue siendo un desafío para la precisión del polígrafo.

La crítica fundamental al polígrafo radica en que no existe una respuesta fisiológica única y universal asociada exclusivamente a la mentira. Las mismas respuestas (aumento del ritmo cardíaco, sudoración) pueden ser causadas por el miedo a no ser creído, la vergüenza, la ansiedad general por la situación de examen, o incluso el recuerdo de eventos traumáticos no relacionados con la pregunta.

El Polígrafo en el Ámbito Legal y Laboral

Debido a las significativas dudas sobre su fiabilidad científica como detector de la verdad, los resultados del polígrafo son generalmente inadmisibles como prueba en la mayoría de los tribunales de Estados Unidos, tanto a nivel federal como estatal. La ciencia detrás del polígrafo no cumple con los estándares requeridos para la admisibilidad de pruebas periciales en juicio, como se ha reiterado en decisiones judiciales importantes.

Esto significa que, si bien la policía o los investigadores pueden usar el polígrafo durante una investigación para guiar interrogatorios o evaluar la credibilidad de un sospechoso, el resultado de la prueba en sí mismo no puede ser presentado ante un juez o jurado para probar la culpabilidad o inocencia de una persona.

En el ámbito laboral privado, las leyes federales y de la mayoría de los estados prohíben a los empleadores exigir a sus empleados o candidatos someterse a una prueba de polígrafo. También prohíben tomar acciones laborales adversas (como no contratar o despedir) basándose únicamente en los resultados de una prueba voluntaria. Existen algunas excepciones limitadas, principalmente para empleadores gubernamentales (especialmente en puestos relacionados con la seguridad nacional) y, en algunos casos, para investigaciones de robos o fraudes en el sector privado, aunque bajo estrictas regulaciones.

¿Cuál es el objetivo de la prueba de polígrafo?
Tienen como propósito identificar aquellas áreas que la persona no revelaría en una entrevista normal, además de apoyar en la confiabilidad de la persona.

El Polígrafo y la Infidelidad: Un Caso Particular

Uno de los usos más controvertidos y emocionalmente cargados del polígrafo es en el ámbito de las relaciones de pareja, específicamente para abordar sospechas de infidelidad. En momentos de crisis de confianza, algunas parejas recurren a esta herramienta con la esperanza de obtener una respuesta definitiva que aclare las dudas y permita avanzar.

El proceso en un caso de infidelidad sigue la estructura general de una prueba de polígrafo:

  • Entrevista Previa: Se discute la historia de la relación, las sospechas y se aclaran las reglas y el proceso de la prueba. Esto ayuda al examinador a entender el contexto y diseñar las preguntas adecuadas.
  • Calibración y Preguntas: Se colocan los sensores y se hacen preguntas neutrales y de control antes de abordar las preguntas relevantes sobre la supuesta infidelidad.
  • Preguntas Relevantes: Estas suelen ser muy específicas y enfocadas en hechos concretos, evitando ambigüedades o juicios emocionales. Ejemplos comunes incluyen: "¿Has tenido contacto sexual con alguien que no sea tu pareja desde [fecha]?", "¿Has enviado mensajes o fotos de carácter sexual a otra persona en los últimos [periodo de tiempo]?", "¿Has borrado comunicaciones para ocultar un engaño a tu pareja?". Las respuestas son típicamente sí/no.
  • Análisis e Informe: El examinador analiza los gráficos y elabora un informe con sus conclusiones sobre si hubo o no indicios de engaño basados en las respuestas fisiológicas.

Este uso plantea preguntas frecuentes y consideraciones adicionales:

Preguntas Frecuentes sobre el Polígrafo en Casos de Infidelidad

A menudo surgen dudas específicas cuando se considera un polígrafo por infidelidad:

  • ¿Qué tan preciso es en estos casos? La precisión sigue dependiendo de los mismos factores que en otros contextos: la habilidad del examinador, la calidad de las preguntas y el estado del examinado. Aunque los profesionales pueden citar altas tasas de éxito en condiciones ideales, la naturaleza emocionalmente cargada de la infidelidad y la alta ansiedad asociada pueden complicar la interpretación.
  • ¿Puede el nerviosismo confundirse con mentiras? Sí, es una posibilidad. Un buen examinador intentará establecer una línea base de nerviosismo general con preguntas de control y buscará patrones de respuesta significativamente diferentes y consistentes ante las preguntas relevantes. Sin embargo, distinguir entre la ansiedad de un inocente y la de un mentiroso no siempre es inequívocamente claro.
  • ¿Se puede engañar al polígrafo? Aunque es difícil y no hay garantías, las contramedidas existen y pueden, en algunos casos, alterar los resultados. Un examinador experto está entrenado para detectar intentos de manipular la prueba, pero no es infalible.
  • ¿Quién debe pagar la prueba? Esta es una decisión que debe tomar la pareja. Puede ser pagada por la parte que sospecha, la parte examinada, o compartida. Acordarlo previamente es importante para evitar conflictos adicionales.
  • ¿Son confidenciales los resultados? Un examinador profesional debe garantizar la confidencialidad. Los resultados generalmente se entregan a la persona que contrató el servicio y a la persona examinada. Compartirlos con la pareja u otros depende del acuerdo inicial y del consentimiento informado firmado.
  • ¿Qué pasa si el resultado es inconcluso? Un resultado inconcluso significa que las respuestas fisiológicas no fueron lo suficientemente claras como para determinar con fiabilidad si hubo engaño o no. Puede deberse a varios factores (estado del examinado, problemas técnicos, preguntas poco claras). En estos casos, se puede sugerir repetir la prueba o considerar el resultado junto con otra información disponible.

Es vital recordar que, incluso si el polígrafo proporciona una indicación, no reemplaza la comunicación abierta y honesta ni aborda las causas subyacentes de la desconfianza en una relación. A menudo, la terapia de pareja o el asesoramiento son pasos necesarios después de una prueba de polígrafo, independientemente del resultado.

Consideraciones Antes de Someterse a una Prueba de Polígrafo

Si estás considerando someterte a una prueba de polígrafo, ya sea por motivos laborales, legales o personales, es importante tener en cuenta lo siguiente:

  • Comprende sus Limitaciones: No es un detector de mentiras perfecto. Mide respuestas fisiológicas que *pueden* estar asociadas con el estrés del engaño, pero también con otras emociones.
  • Asegúrate del Profesional: La habilidad y la ética del examinador son cruciales para la calidad de la prueba y la interpretación de los resultados. Busca profesionales acreditados y con experiencia.
  • Prepárate Emocionalmente: La prueba puede ser estresante, incluso para personas que dicen la verdad. Entender el proceso puede ayudar a mitigar parte de la ansiedad.
  • Considera el Propósito: Reflexiona sobre por qué se realiza la prueba y qué harás con el resultado. Si es por un asunto legal, ten en cuenta que el resultado probablemente no será admisible en juicio. Si es por un asunto personal, piensa en las posibles consecuencias para tus relaciones, independientemente del resultado.
  • Voluntariedad: En la mayoría de los contextos (fuera de ciertas áreas gubernamentales o excepciones legales muy concretas), someterse a un polígrafo debe ser un acto voluntario.

Aunque el polígrafo puede ofrecer una perspectiva o una herramienta para la investigación, no es una solución definitiva ni una verdad incuestionable. Sus resultados deben ser considerados con cautela y, idealmente, en conjunto con otras fuentes de información.

Comparativa de Usos del Polígrafo

ContextoPropósito PrincipalAdmisibilidad Legal (General)Impacto del Resultado
Selección/Evaluación de PersonalEvaluar antecedentes y confiabilidad; prevenir riesgos internos.No aplicable directamente en procesos judiciales laborales por el resultado.Puede influir en la decisión de contratación o continuidad laboral (limitado en sector privado).
Investigación CriminalObtener información; guiar interrogatorios; evaluar credibilidad inicial; buscar confesiones.Generalmente inadmisible como prueba directa en juicio.Puede influir en la dirección de la investigación o llevar a una confesión.
Ámbito Privado (Ej: Infidelidad)Intentar resolver dudas y crisis de confianza; obtener una indicación sobre eventos específicos.No aplicable en un contexto legal formal (salvo acuerdos privados).Puede influir drásticamente en la relación; a menudo requiere pasos adicionales (diálogo, terapia).
Seguridad Nacional (Gubernamental)Evaluación de personal para acceso a información clasificada; investigaciones internas en agencias sensibles.Generalmente inadmisible como prueba en juicio (aunque puede haber reglas internas).Puede influir significativamente en el empleo o la autorización de seguridad.

Preguntas Generales Adicionales

  • ¿Cuánto dura una prueba de polígrafo? Generalmente entre 1 y 2 horas, incluyendo la entrevista previa, la fase de preguntas y el análisis inicial.
  • ¿Me afecta tener una condición médica? Algunas condiciones cardíacas, respiratorias o neurológicas, así como ciertos medicamentos, pueden afectar las respuestas fisiológicas y deben ser informados al examinador.
  • ¿Qué se hace con los resultados? El examinador analiza los gráficos y emite un informe con sus conclusiones. Este informe se entrega a la parte que contrató el servicio y, a menudo, también al examinado.

En conclusión, el polígrafo es una tecnología que mide respuestas fisiológicas asociadas al estrés y la ansiedad, con el objetivo de inferir la veracidad de una persona. Si bien puede ser una herramienta útil en ciertos contextos, especialmente como apoyo en procesos de selección o investigación, no es un "detector de mentiras" infalible. Sus limitaciones científicas son significativas, lo que explica por qué sus resultados son generalmente inadmisibles como prueba en los tribunales. Utilizar un polígrafo requiere un entendimiento claro de sus alcances y limitaciones, la intervención de profesionales cualificados y la consideración de que es solo una pieza más en el complejo puzzle de evaluar la credibilidad humana o resolver conflictos.

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Jesús Porta Etessam

Soy licenciado en Medicina y Cirugía y Doctor en Neurociencias por la Universidad Complutense de Madrid. Me formé como especialista en Neurología realizando la residencia en el Hospital 12 de Octubre bajo la dirección de Alberto Portera y Alfonso Vallejo, donde también ejercí como adjunto durante seis años y fui tutor de residentes. Durante mi formación, realicé una rotación electiva en el Memorial Sloan Kettering Cancer Center.Posteriormente, fui Jefe de Sección en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid y actualmente soy jefe de servicio de Neurología en el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz. Tengo el honor de ser presidente de la Sociedad Española de Neurología, además de haber ocupado la vicepresidencia del Consejo Español del Cerebro y de ser Fellow de la European Academy of Neurology.A lo largo de mi trayectoria, he formado parte de la junta directiva de la Sociedad Española de Neurología como vocal de comunicación, relaciones internacionales, director de cultura y vicepresidente de relaciones institucionales. También dirigí la Fundación del Cerebro.Impulsé la creación del grupo de neurooftalmología de la SEN y he formado parte de las juntas de los grupos de cefalea y neurooftalmología. Además, he sido profesor de Neurología en la Universidad Complutense de Madrid durante más de 16 años.

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